Cada día es más frecuente escuchar a nuestro entorno, en los medios, en el trabajo, etc. hablar de ansiedad. ¿Pero qué es realmente? ¿Cómo puedo saber si realmente estoy sintiendo ansiedad? ¿Debería pedir ayuda profesional?

En este artículo podrás dar respuesta a estas preguntas.

¿Qué es la ansiedad?

La ansiedad es una reacción normal que aparece cuando nos sentimos amenazados por un peligro, ya sea externo o interno. Se activa nuestro sistema de alerta, dándose cambios a nivel fisiológico. Nuestro cuerpo se prepara para enfrentarse al peligro. Es por esto que la ansiedad en sí es adaptativa y nos ha permitido sobrevivir a lo largo de siglos de evolución.

No obstante, hay en ocasiones en las que la ansiedad es disfuncional. Cuando la respuesta fisiológica, cognitiva y emocional es desproporcionada o hay una ausencia de peligro real, estaríamos ante una ansiedad disfuncional.

¿Cómo saber si tengo ansiedad?

Hay una serie de síntomas característicos que pueden ayudarnos a saber si se trata realmente o no de ansiedad.

• Preocupación: El elemento principal de la ansiedad es la preocupación. Es constante y excesiva. Aparece en forma de pensamientos rumiativos e incluso intrusivos, sobre situaciones futuras que se perciben como amenazantes y peligrosas. Dicha preocupación puede ser relativa al trabajo, a la familia, a la economía, a la salud… y también por elementos o situaciones cotidianas como qué comer, qué ponerse… Una clave para identificar este tipo de pensamientos es observar si comienzan con: «¿Y si…?«
• Estado de nerviosismo: se instala en el cuerpo un estado de nerviosismo prácticamente constante, que interfiere en la vida diaria (problemas para dormir, menos paciencia, más irascibilidad…)
• Síntomas físicos: puede ser tensión corporal, sentir palpitaciones, tener sudoraciones, sufrir dolor de cabeza…
• Somatizaciones: entendemos por somatización cuando el malestar emocional se expresa a través de un síntoma físico. En el caso de la ansiedad, por ejemplo, podemos experimentar problemas gastrointestinales.
• Alteraciones del sueño: puede aparecer dificultad para conciliar el sueño, estando despierto·a en la cama largos periodos de tiempo hasta quedarte dormido·a. También puede haber problemas para dormir toda la noche, despertándote en mitad de la noche o muy temprano, sin poder volver a dormirte.
• Dificultad para concentrarse o alteraciones de la memoria. Por ejemplo, quedarse en blanco.

¿Debería pedir ayuda profesional?

Todos·as en algún momento de nuestra vida hemos podido sentir ansiedad porque, como explicábamos al inicio, es una respuesta adaptativa, totalmente normal.

En cambio, si sientes que se prolonga mucho en el tiempo, presentas varios de los síntomas explicados anteriormente y están interfiriendo en tu día a día, te animo a que pidas ayuda profesional.

Es normal no saber qué hacer en esta situación ni disponer de todas las herramientas para gestionar la ansiedad. No tienes por qué pasar solo por esta situación, no tienes porqué vivir sola el malestar.

Desde Lume Psicología, centro de psicología en Madrid y online, podemos ayudarte. Juntos·as iremos entendiendo tu ansiedad y por qué está apareciendo, aprenderás estrategias de autorregulación e iremos creando nuevos hábitos y estilo de vida más alineados contigo, con tus valores y tus necesidades.